lunes, 30 de abril de 2012

Empresas Sacras.

Hola a todos!!

Aprovechando este fin de semana largo, queríamos subir alguna de las tantas cosas que nos han ido quedando en el tintero.

La semana pasada recordábamos que hace unos meses, investigando en la Biblioteca Mayor de la UNC, habíamos dado con un libro de principios de los años 40'. Era un tomo de tapas duras, color manteca, con hojas aceradas, en muy buen estado de conservación que pertenecía a una colección encargada por la Academia Nacional de Bellas Artes y que tenía como finalidad rastrear el Patrimonio artístico colonial del territorio argentino.

Nos llamó la atención el encargado de semejante proyecto: el Arq. Mario José Buschiazzo (1902-1970), uno de los impulsores del redescubrimiento, restauración e investigación de varios monumentos nacionales y pionero en la recuperación del Patrimonio artístico-arquitectónico. Integró además la llamada Comisión Nacional de Monumentos, allá a principios de 1930.

El libro era increíble. La calidad fotográfica (si bien está en blanco y negro) era exquisita (recordemos que estamos hablando de los años 1940) y llamaba la atención que es uno de los pocos documentos que atestiguan la decoración original de la cúpula de la Iglesia de la Compañía de Jesús de Córdoba. Asimismo, hay un detalle minucioso de las llamadas "Empresas Sacras", una serie de tallas que rodean todo el perímetro del templo. Están ubicadas a una gran altura, por lo cual son difíciles de apreciar.

Dichas Empresas representan, mas bien ilustran los objetivos de la Orden de Loyola, poseen un lema en latín (en algunos casos ilegible o repintado) y son un testimonio de la calidad artística de las manos nativas que las tallaron. Entre ellas se intercalan pinturas, con fuerte influencia de la llamada "Escuela Cuzqueña", cuyos autores al día de hoy no han podido ser identificados aunque es muy probable que se trate de las primeras obras pictóricas del territorio cordobés.


En la década del 60' del siglo XX, se produjo un incendio en la Iglesia de la Compañía que ennegreció toda la cúpula y algunas empresas sacras. Las siguientes imágenes muestran como era este espacio y nos demuestran el detalle y la exquisitez del Barroco criollo.





Empresas Sacras-Fotografías antiguas.

Restos del Ob. Fray Fernando de Trejo y Sanbria y del Presbítero Ignacio Duarte y Quirós en la cripta ubicada debajo de la Iglesia de la Compañía.

 Detalle de una de las bases de la cúpula con la decoración original, anterior al incendio. Las bases (en arquitectura pechinas) tenían pinturas que representaban a los cuatro evangelistas.

 Una de las llamadas "Empresas Sacras". La frase, en latín, significa "en toda la tierra se escucha su voz" y se  observan clarines entre las nubes.

 Otra muestra de empresa sacra. En este caso se lee la frase "omnibus omnia" que significa "todo para todos".

 "Laxari impatien", impaciente por ser ensanchada.

 En esta empresa se puede observar una brújula y una estrella. La inscripción en latín dice justamente "esta estrella me rige".

 Detalle de la decoración del altar, con relieves en dorado y querubines.

 Detalle de la bóveda del Templo, con la característica de haber sido trabajada como la quilla (base) invertida de un barco. El hacedor de semejante proyecto fue el Padre Felipe Lemaire, nacido en Bélgica.

Uno de los llamados "ángeles músicos" que decoraban toda la cúpula.

"Omnia solis habet", todo procede del sol.

Uno de los evangelistas que decoraban la base de la cúpula.

Bellísima talla de imaginería del periodo colonial que representa a "Ecce Homo" o también denominado "Señor de la paciencia". La naturalidad del rostro y el sentimiento de dolor que ofrece la obra fueron recursos muy utilizados a la hora de evangelizar.

Ángeles y querubines con flores e instrumentos musicales ascendían por toda la cúpula.





Panorámica de la cúpula.

Evangelista en la base de la cúpula. Vale recordar que estas pinturas (los evangelistas) son posteriores a la expulsión de la orden, producida en 1767.

Coronación de la virgen. Esta obra se encontraba en el cierre de la cúpula y estaba realizada sobre cuero.

martes, 24 de abril de 2012

Un año después...

Un año después...

Pasó bastante, bastantísimo tiempo desde nuestra última entrada. Pasa que los vaivenes cotidianos nos hicieron abandonar durante un tiempo este espacio.


Este año lo empezamos con la idea de seguir para adelante, ofreciéndoles nuevas historias, nuevo material e incursionando en las estancias de nuestro interior (siempre y cuando nos den algunos números JAJA).


La esencia es la misma: el ofrecerles otra visión, un tanto más accesible de nuestro pasado.
Nos quedaron bastantes cosas en el tintero y la idea es reflotarlas, plasmarlas en este espacio.


Entre las temáticas a abordar haremos hincapié en la Iglesia de la Compañía (cuya historia nos quedó a medio terminar), el edificio del actual Museo de la UNC (Universidad Nacional de Córdoba) y el Colegio Nacional de Monserrat.


En próximas entradas abordaremos el interior provincial incursionando en los establecimientos rurales fundados por los padres de la Compañía y abriremos el debate acerca de la relación con los esclavos y los grupos indígenas. Conocer la presencia del negro en Córdoba, sus tradiciones y aquellos detalles que la historiografía a intentado tapar desoyendo a los actores que contribuyeron en gran medida a la conformación de la leyenda.


El enfoque de este año tenderá a ser más profundo, tratando de comprender los pormenores de una sociedad colonial altamente estratificada, con gran presencia de la Iglesia y ávida de sumar nuevas almas. Está demás decir que no descuidaremos nuestra idea central: la de mostrar y analizar el arte mestizo, el Barroco Latinoamericano.


También realizaremos una investigación en torno a la polémica desatada por la destrucción del piso original de la Iglesia Nuestra Señora de la Merced de la localidad de Alta Gracia. El tema generó gran controversia debido a la falta de previsión y poco apego a la conservación de un patrimonio arquitectónico que pertenece a toda la humanidad.


Bienvenidos nuevamente, todas las sugerencias que quieran realizar serán más que bienvenidad. Trataremos que la página se actualice cada quince días, con el objetivo de hacer más dinámico el desarrollo de la misma.


Saludos a todos!!


Guillermo Carranza Córdoba y Leandro Vinyals.

                                               Ingreso a la Estancia de Jesús María

Perspectiva de la fachada de la Iglesia de San Isidro Labrador, en la
Estancia de Jesús María. A principios de los años 40´del S.XX
se decidió convertir al establecimiento en Museo Histórico Nacional con la
subsiguiente restauración.

 Detalle de la Galería de la Estancia Jesuítica de Jesús María. En esta foto y en la siguiente se observan los "trapiches" que se utilizaban para la fabricación del vino denominado "Lagrimilla de Oro" que se sirvió en la mesa de los reyes de España durante la dominación de la Casa de Austria, que se prolongó entre los años 1516 (Carlos V) y 1700 (Carlos II).






 Detalle de la espadaña (campanario) de la Estancia de Jesús María.

 La Cúpula, asomando del conjunto.

 Una de las inscripciones visibles en la espadaña. Se lee el año 1762 y más arriba el anagrama de la Compañía, IHS.



Una "posta" a la vera del antiguo Camino Real que recorría todo el norte de Córdoba y llegaba hasta el Alto Perú (actual Bolivia). Era la verdadera columna vertebral del tráfico comercial entre el Río de la Plata y el Virreinato del Perú. La creación del Virreinato del Río de la Plata por orden de Carlos III en 1776 (posterior a la expulsión de los Jesuitas, ocurrida en 1767) benefició el intercambio de mulas, carretas y ganado y tuvo al Camino Real como vía de enlace, fortaleciendo la comunicación con el Puerto de Buenos Aires, el más importante del sur del continente.